Hace quince días, compartíamos con vosotros la crónica de nuestro encuentro anual en el aniversario del derribo del Lugar de Memoria de la Cárcel de Carabanchel. En esas citas, que venimos repitiendo desde hace siete años, y en otras especiales, hemos procurado dejar constancia visible de nuestro homenaje y también de nuestra reivindicación.
A lo largo de estos años, se han ido instalando o renovando diferentes paneles con nombres, lemas o imágenes que, salvo en muy contadas ocasiones, han sido respetados y han permanecido colgados en la valla hasta que la meteorología los ha deteriorado.
Ya el pasado domingo, día 1 de noviembre, tuvimos que recolocar varios tableros de los utilizados el día del acto para mostrar el rótulo: "CÁRCEL DE CARABANCHEL - CENTRO DE LA MEMORIA". Teníamos dudas de si habían fallado las bridas utilizadas para su sujeción o, por el contrario, se trataba de un hecho intencionado.
Ya no hay duda.
Alguien -y no se trata de una gamberrada- ha cortado los alambres con los que habíamos reforzado el anclaje de las maderas y ha partido los paneles desprendidos. De esta forma, han quedado inutilizables para una posible recolocación.
También, en menos de quince días, ha desaparecido uno de los cuadros realizados por miembros del colectivo "Keller" de La Tabacalera y han destrozado otro, concretamente el que reflejaba, de forma acertadamente dramática, lo que era el garrote vil.
¿A quién molestan esos gráficos?
Parece claro que, en contra de lo que sostienen algunos nuevos políticos, los "vencedores" (que los hubo y los hay) siguen negando el más mínimo recuerdo y reconocimiento a los "vencidos". El modesto memorial popular, ahora amputado, evidencia la necesidad urgente de crear espacios permanentes de divulgación de nuestra historia más reciente.
No sea que se empiece por partir unas maderas, se continúe rompiendo cristales y luego...
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